Crucero Político
José Luís Loyo Ochoa
Inseguridad ciudadana
Entre ratas estamos
SI AUNADO A LOS PESIMOS POLÍTICOS, LAS MAFIAS Y GOBIERNOS MATANDOSE INCLUYENDO A GENTE INOCENTE, AÑADIR RATAS DE DOS PATAS ES DECIR QUE NO TENEMOS GOBIERNOS.
Veracruz, Ver. MX. Aún y cuando traten de decirnos que no sucede nada, que vivimos en la paz que emana de un gobierno preocupado por el bienestar ciudadano, la realidad dista mucho del dicho, el pueblo vive hoy en una incertidumbre que raya en esquizofrenia, nadie está salvo, los delincuentes, sean del bando que usted guste y mande, nos tienen asolados a los ciudadanos y no existe un solo rincón del País donde se pueda respirar tranquilidad.
Existen pruebas que quieren callar en cuanto hace a los abusos que cometen en contra de los ciudadanos quienes, supuestamente, están para velar por su bienestar, abusos que van desde el robo de pertenencias hasta vejaciones y humillaciones, amén de mil lindezas más, pero son autoridad, y de ahí que esté prohibido externar esos abusos, si acaso son situaciones que van acorde a las investigaciones que realizan, aunque en esa investigación a usted se le pierdan las pertenencias que traiga en su automóvil o en sus bolsillos.
Luego entonces que hacer?, cuando la ciudadanía pierde pertenencias a manos de los buenos debe de callar, no se puede culpar a quienes nos están ¿protegiendo?, si es a manos de malos también debemos de callar, pueden vengarse en nosotros o en nuestra familias, el caso es que Juan pueblo es el único jodido, somos los que nos sacamos el premio gordo sin comprar aquel cachito de la lotería, es decir, somos los afortunados porque tenemos quien nos cuida, y como dice el del cuento, “muévete mi rey”, no soy el diablo pero tú eres el Buey.
Quien esto mal les escribe soy vecino de lo que pomposamente se llama el centro de la ciudad y puerto de Veracruz, no somos de la clase llamada alta, nuestro barrio es más de clase baja y no existen en él millonarios y menos políticos encumbrados, es decir, somos de los jodidos, de los que solamente contamos con el diario sustento y , cuando llegan los recibos de la pinche y hedionda paraestatal comisión federal de electricidad tenemos que recurrir al montepío para poder pagar su mendigo recibo, pero también somos ciudadanos que pagamos nuestros muy exagerados impuestos, del predial, del agua y de lo que se les ocurra a nuestras sacro santas y benévolas autoridades, ello sin derecho a rechistar, es decir, contribuimos a que los políticos y sus amasias y “amasios” (también en San Juan hacen aires), vivan como reyes.
Pero que recibimos?, demagogia y atole con el dedo, promesas vanas que solamente ellos son los que las creen cuando andan en sus campañas pidiéndonos el voto.
Para la clase política el pueblo solamente es el escalón para que ellos logren sus sueños y para cuando han llegado dejan el habito de hermanos de la caridad para vestir sus trajes de oro, las promesas?, ¿Cuáles?, ¿Quién se les creyó?, ahora ya ni el saludo nos brindan.
La calle de Mariano Arista, en lo que repetimos, pomposamente dicen es la zona centro, todos los ciudadanos al día de hoy tenemos que turnarnos para poder estar vigilantes, los robos son al día de hoy el pan nuestro diario, no existe vigilancia que permita sentir a los amantes de las cosas ajenas el menor síntoma de temor, “trabajan” los ladrones con toda la impunidad que le permite una autoridad carente del mínimo de eso, AUTORIDAD, y bien es en la madrugada o el medio día, las ratas de dos patas nos roban impunemente, y no nos referimos a los políticos, el robo de esa clase a quienes deben de sentirse protegidos por quienes tienen dizque obligación y encomienda de velar por la ciudadanía es de otra clase de ratas, de los de dos patas.
El Jueves veintisiete del presente mes de Enero fue fructífero para los amantes de los ajeno, el ausentismo de cualquier vestigio parecido a la clase policiaca les permitió hacer presencia por todo el barrio, barrieron desde tienditas hasta hogares particulares sin que nadie les pusiera el alto respectivo, ¿y las autoridades? Bien gracias, durmiendo la mona dicen los teporochos.
Para romper o trozar barrotes de una pulgada de grosor deben de traer instrumentos grandes que no se pueden ocultar en cualquier bolsa, y ellos rompieron desde esos barrotes hasta esos candados que usan quienes tenemos miedo de que nos saqueen los amantes de lo ajeno, pero repetimos, ante la ausencia de vigilancia por la zona no importa el bulto que traigan, nadie les habrá de preguntar siquiera para que llevan esas herramientas, y si en cambio hasta el pitazo y aviso les den en donde pueden proveerse de mejores cosas.
Tienditas y hasta una tortillería fueron saqueadas esa madrugada, y si usted cree que solo son trabajadores nocturnos están en un error, al medio día también laboran esa clase de ratas, quitan celulares y bolsos a diestra y siniestra, sean mujeres, jóvenes, ancianos y gente madura.
Pero como dicen ellos, los políticos: EN VERACRUZ NO EXISTE LA VIOLENCIA, los medios somos a no dudar unos mentirosos que estamos inventando argucias para desacreditar al gobierno en contubernio con los malos. Pinches tundeteclas mentirosos, somos inventores de todo lo que sea para desacreditar a los gobiernos, tanto municipales, estatales como federales.
Y para colmo de males, la calle de MARIANO ARISTA, desde la Avenida Pino Suárez empieza su hundimiento, ello sin que haya quien venga a echarle aunque sea un saco de balastro, todos al por igual corremos el riesgo de que nuestras viviendas se hundan en los pozos que se forman a todo lo ancho de la calle de Mariano Arista, existen socavamientos que van directamente hacia las casas, los trailers de una harinera española siguen pasando como si estuvieran en la mejor autopista del País. ¿Reportar los robos y los hundimientos? Diario, pero ni policías ni municipio se presentan para solucionar los problemas. Pero en honor a la verdad esos hundimientos no son de ésta administración, datan de muchas administraciones atrás.
Repetimos, ¡pinches tundeteclas tan metiches, solamente inventamos, Veracruz vive en calma y bienaventuranza, aunado a eso, los talleres automotrices también son pueblo y tienen que ir trabajando arreglando los desperfectos que sufrimos quienes tenemos que caer en hoyancos y pozas formadas en nuestras calles. Y por hoy hasta aquí llegamos, pidiendo a todos los santos y uno que otro diablo que no nos vayan a tomar por agitadores, y al mismo tiempo les dejamos nuestros correos electrónicos para tratar de servirles mientras nos dejen los señores autoridad y políticos: loyocruceropolitico@yahoo.com.mx y loyocrucero@hotmail.com, y gracias
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